Sismo sólo afectó levemente 111 escuelas, de un total de 5,640 en todo el ámbito nacional

Santo Domingo.- De un total de 5,640 escuelas existentes en territorio nacional, 111 fueron afectadas levemente en sus estructuras por los efectos del fuerte temblor de tierra que afectó el país el pasado martes, informó el secretario de Educación, licenciado Melanio Paredes.
El funcionario dijo de los planteles afectados solamente dos requieren de algún tipo de intervención drástica, porque sufrieron daños en sus estructuras.
Estos fueron el liceo Fabio Amable Mota, en Santo Domingo Este, donde un área de la losa sufrió daños, por lo que fue aislada para ser intervenida sin afectar el normal desenvolvimiento de la docencia.
Además, la Escuela Victoria Peña, en la comunidad de Cristóbal, Duvergé, provincia Independencia, que tiene una grieta profunda que requiere una intervención drástica, que no implica la paralización de las clases.
Paredes habló en conferencia de prensa este jueves en la sede principal de la cartera educativa, en la que dio a conocer el reporte de la primera evaluación de las consecuencias en el área educativa de las secuelas del terremoto que devastó a Puerto Príncipe, capital de Haití.
En auxilio de Haití
Paredes informó, además, que el pasado miércoles la cartera educativa envió sendas comisiones a las fronteras Sur y Norte, con la misión de constatar las condiciones imperantes en esos lugares geográficamente más cercanos a las áreas de desastres.
El ministro de Educación indicó que como la institución es parte del Programa Institucional de Gestión de Riesgos, evalúa en coordinación con la Cruz Roja Dominicana, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Secretaría de Salud Pública, una serie de intervenciones para ir en auxilio de los haitianos afectados por el terremoto, especialmente niños y niñas estudiantes de la vecina nación.
Dijo que los estudiantes haitianos están impactados por lo dramático de la situación, porque han visto interrumpido de golpe su proceso formativo y que además de las heridas físicas, hay que curarles las heridas espirituales. “Estamos trabajando con nuestro departamento de Educación y Psicología, a los fines de poder coordinar esfuerzos, a través de los mecanismos que ha establecido el Gobierno dominicano, para ir a Haití, donde cientos de miles de niños se encuentran en carpas colocadas en áreas verdes”, puntualizó.
Destacó que con la experiencia de la tragedia ocurrida hace varios años en Jimaní, se trabaja para que profesionales de la conducta puedan ir a Puerto Príncipe a asistir a los docentes y a las autoridades educativas haitianas para tratar de retornar, lo más pronto posible, a la normalidad la alegría de niños y niñas del país vecino, como una forma de contribuir a que continúen su proceso educativo y este lamentable desastre no genere una ruptura insalvable.
“Vamos a encaminar pasos para instalar un centro de operación en nuestras instalaciones y escuelas que estén disponibles en Jimaní, para a partir de allí poder llegar al hermano país y poder asistirlo en esas condiciones”.
Melanio Paredes también analizó con el secretario de Salud Pública, Bautista Rojas Gómez, la posibilidad de utilizar las escuelas de las zonas fronterizas como “vehículo de información u orientación a las familias, en ambos lados de la frontera para evitar el impacto que pudiera degenerar en epidemias infecciosas que afecte tanto a la población haitiana como a la dominicana, basado en la experiencia con la pandemia H1N1 y las iniciativas para enfrentar las amenazas del dengue”.
Se restablece la docencia
El secretario de Educación reiteró que la docencia se ha restablecido en todo el país, inclusive en las provincias María Trinidad Sánchez, donde se suspendieron las clases como medida preventiva luego del sismo, y Puerto Plata, localidad en la que continuaron torrenciales aguaceros, lo que provocó dificultades en algunas escuelas, por la crecida de ríos y posibles inundaciones.
Paredes enfatizó que los impactos sufridos en las 111 escuelas fueron leves, como grietas, pero que las escuelas se construyen tomando en cuenta el criterio de juntas estructurales de expansión, para que cuando se produzca un terremoto se muevan, técnica que permite proteger el grueso de la estructura de los efectos del movimiento telúrico y se corrigen con el mantenimiento de esas estructuras.
Consideró que en algunos lugares como en la frontera Sur había cierta aprehensión de las familias a enviar sus hijos a las escuelas, por temor a que seguían ocurriendo réplicas del sismo en dicha zona. “Se han dado las instrucciones de lugar, se ha planteado que todo está bajo control y por consiguiente se retornó a la normalidad en esas áreas donde las familias todavía en el día de ayer presentaban algunos niveles de temor”, expresó Paredes.
Acompañaron al secretario de Educación en la rueda de prensa los subsecretarios, Guadalupe Valdez, encargada de Participación Comunitaria, Adalberto Martínez, director de la Oficina Nacional de Supervisión, así como los ingenieros Geovanny Romero, director de Mantenimiento e Infraestructura Escolar, Francisco González, director de Edificaciones y Cristina Molina, directora de Orientación y Psicología.